Wednesday, July 23, 2014

¿Hispano o latino?



Al vivir en California, es común que nos encontremos constantemente con términos diversos para referirse a la población hispanohablante que habita en esta región. La inmigración de personas de distintas nacionalidades y regiones del mundo hace difícil definir una misma denominación para todos aquellos que hablan español. De este modo, los términos hispano o latino salen a relucir y muchas veces se usan de manera indistinta. ¿Cuáles son los origenes y las connotaciones de los usos de estos términos? Existen varias acepciones para estas palabras, entonces vamos a comenzar por sus definiciones históricas y literales para después llegar al uso o los usos contemporáneos.

Hispano

El término hispano tiene sus raíces en la antigua roma. Los romanos le llamaban Hispania al territorio de la península ibérica a partir del siglo I a.C. por escritores latinos y griegos como alternativo al nombre Iberia. Sin embargo, la palabra en sí no es de origen latino. La palabra viene del fenicio y está documentada desde el segundo milenio antes de Cristo. Como aún no existía Portugal ni España en esa época, todos los habitantes de esa zona vivían en Hispania.

En los siglos VI y VII ya se empieza ver el uso de Spaniae y España pero con un uso inestable hasta la Alta Edad Media durante el dominio de los musulmanes. El reino de Portugal existía aparte de lo que se conocía como España como escisión del anterior Reino de Asturias durante la Reconquista.
El uso de la palabra hispano toma importancia para los Estados Unidos en 1970 debido a las políticas de su gobierno. Primero se tomó como una forma de establecer una categoría racial que después se tuvo que ampliar como categoría independiente. De esa forma, requiere identificar también raza, etnia e idioma nativo.

Gracias a las idiosincrasias de los estadounidenses, el intento de categorizar un grupo tan variado resulta en mucha confusión y malentendidos. Según la Real Academia Española, hispanos son los habitantes de la antigua Hispania romana y los ciudadanos de las naciones de Hispanoamérica, entre las que se incluyen España y los hispanohablantes de América, África y Asia así como los habitantes de los Estados Unidos que sean originarios de algunos de estos países. Pero en los Estados Unidos no se consideran los filipinos, guameños o judíos españoles como hispanos.

Latino

Los términos Latino y Latina para referirse a cierto grupo demográfico tienen sus raíces en el latín. Su uso se deriva de las diferencias culturales entre los países de idiomas romances contemporáneos como Italia, España, Francia, Portugal y Rumania, con otros países incluyendo los países alemanes del noroeste y centro de Europa. Tendencia que creció por la influencia del protestantismo.

La introducción del término América latina se debe a un embajador francés en el siglo XIX cuyo objetivo fue separar emocionalmente a los países que acababan de independizarse de España y favorecer los intereses de Francia. Esta idea fue aceptada y difundida por intelectuales  latinoamericanos y líderes políticos que ya no miraban hacia España y Portugal como modelos culturales sino hacia Francia.

En los Estados Unidos, el término Latino fue oficialmente adoptada en 1997 por el gobierno como alternativa al uso de hispano. Sin embargo, sigue siendo un término cultural, y no racial, por lo cual depende de cómo se identifica la persona.

Confusión/Polémica

Por su ambigüedad etimológica, estos dos términos se han encontrado como protagonistas de un debate, a veces muy apasionado, sobre todo en los Estados Unidos. En el afán de categorizar a tantos grupos de personas bajo un nombre aprobado puede ser muy difícil para este país. Supuestamente, hispanos son aquellos que provienen de un país de cultura hispanohablante que por naturaleza excluye a países latinoamericanos como Brasil y los territorios franceses e ingleses. Pero los latinos, sí se definen por latinoamericanos, excluyen a los portugueses y españoles. Si tomamos la definición más amplia de la palabra entonces estamos incluyendo a toda la Europa latina, sus territorios y todos esos otros países que llevan influencia latina por el mundo.

Lo cierto es que estas palabras tienen mucho que ver con cuestiones de identificación cultural y también con motivaciones políticas. Su elasticidad puede dividir igual que unir a un gran número de personas, no solamente en los Estados Unidos sino también en todo el mundo.

Hispanic or Latin(@)?

 

Living in California, we constantly find different terms to refer to the Spanish-speaking population living in this region. The immigration of people of different nationalities and regions makes it difficult to define a single name for all those who speak Spanish. Thus, the terms Hispanic or Latino come to light and are often used interchangeably. But what are the origins and implications of using these terms? There are a lot of definitions for each of these words so let's start form their historic roots and make our way to their contemporary use.

Hispanic

The term Hispanic comes from ancient Rome. The Romans called all the territory in the iberic peninsula, Hispania from as far back as the first century BCE by Latin writers as an alternative to the use of the term, Iberia. However, the word itself is not of Latin origin. Hispania comes from Phoenician and can be dated back to about the second millennium BCE. Since neither Spain nor Portugal existed in this time, all inhabitants of this land were residents of Hispania.  

The term became significant to the U.S. in 1970 when it was integrated to the U.S. census.It was used as another racial category that quickly had to be broadened to more of a cultural identification encompassing ethnicity, language and race. Thanks to America's idiosyncrasies, the attempt to group such a large mix of people under a single umbrella term resulted in a lot of confusion and controversy.

According to the RAE, arguably the most important dictionary of the Spanish speaking language, Hispanic is defined as: inhabitants of the ancient Hispania Romana, as well as, the citizens of Hispanoamerica including Spain and all Spanish speaking people residing in any country but who are originally from a Spanish speaking country. However, in the United States, those from the Philippines, Guam and Spanish speaking Jews are not considered part of this definition.  

Latin@

The terms Latin or Latin@ in order to refer to someone from a certain demographic come from Latin (not surprisingly). Its use derives from the cultural differences of European countries that speak romance languages such as Spain, Portugal, Italy, France and Romania with countries of more Germanic influence in central and northwestern Europe.

The term Latin America is credited to a french ambassador of the XIX century who wanted to sever the emotional ties that the newly independent countries had with Spain in order to further France's interests in the region. This idea was accepted and promoted enthusiastically by intellectuals and political leaders in Latin America at the time who no longer looked to Spain and Portugal as a cultural model and started favoring France instead.

In the United States, The term Latino was officially adopted in 1997 as an alternative to the word Hispanic. However, the word is still a cultural reference, and not a racial one, which depends very much on how one decides to be identified.

Confusion/Controversy


Because of their ambiguity, these two words have found themselves at the center of much debate, especially in the United States. Their insistence in categorizing such a large group has proven very difficult for this country. So, if we assume that Hispanics are those who are or have roots in a Spanish speaking country, then we exclude Brazil and the territories of France and England in the Americas. If we use Latino, in terms of Latin America, then we exclude Spain and Portugal. But if we use the broader sense of the word Latin, then we include all of Latin Europe as well as their territories and any countries influenced by them.

The truth is that these terms have a lot to do with political motivations as well as cultural identification. The elasticity of these words can serve to separate many people or to unify them, not only in the United States, but abroad as well. It is important to understand their reasons for being as well as their use or misuse.